sábado, 31 de diciembre de 2011

El Arbol Que No Produce // Lucas 13:6-9


Dios nos ha conservado durante un año más! Y en este nuevo año, Dios quiere un nuevo yo! Dios quiere que usted y yo desarrollemos un nuevo estilo de vida espiritualmente hablando.

El punto es simple: Dios quiere que hagamos algo, y si no lo hacemos, si no contribuimos, si no lo compartimos, entonces todos vamos a perder y no vamos a recibir bendición. El hecho de que usted y yo aun estamos aquí significa que Dios todavía está trabajando en todos nosotros! Eso nos da esperanza al leer la siguiente escritura:

[6] Además, Jesús les puso este ejemplo: Un hombre había sembrado una higuera en su viñedo. Un día, fue a ver si el árbol tenía higos, pero no encontró ninguno. [7] Entonces le dijo al encargado del viñedo: “Tres años seguidos he venido a ver si esta higuera ya tiene higos, y nunca encuentro nada. Córtala, pues sólo está ocupando terreno.” [8] El encargado le dijo: “Señor, deje usted la higuera un año más. Aflojaré la tierra a su alrededor, y le pondré abono. [9] Si el próximo año da higos, la dejará vivir; si no, puede ordenar que la corten.” Lucas 13:6-9 (TLA)

Un hombre plantó un árbol y esperaba que el árbol creciera y se desarrollara. Él esperaba encontrar algo de fruta en el árbol. El propietario del árbol simplemente hizo una petición razonable. Era su árbol y esperaba que esta higuera estuviera mejor que en los años anteriores. En los tiempos bíblicos, las higueras eran valiosas porque daban fruto.

Si comparásemos esto con Dios y el ser humano podríamos decir lo siguiente: Dios espera encontrar alguna fruta colgando del árbol; El espera que nosotros produzcamos frutos. Fruto de la fidelidad, fruto de la generosidad, fruto de la armonía familiar, fruto de la comunión, fruto del ayuno y la oración.

Pero el propietario no encuentra nada y dice: "Córtala! He venido en busca de frutas durante los últimos tres años y he encontrado ninguno! Córtala! La he plantado, protegido y preocupado por ella, sin embargo, no ha producido ningún fruto; Córtala!" Me llama la atención que el propietario hace una pausa en el texto antes de decir que se corte el arbol. Es decir, que hubo una pausa para meditar y evaluar la situación. ¿Que debería hacer el propietario del árbol? Veamos las siguientes Escrituras:

"Si una de mis ramas no da uvas, mi Padre la corta; pero limpia las ramas que dan fruto para que den más fruto." Juan 15:2 (TLA)

[4] Si ustedes se mantienen unidos a mí, yo me mantendré unido a ustedes. Ya saben que una rama no puede producir uvas si no se mantiene unida a la planta. Del mismo modo, ustedes no podrán hacer nada si no se mantienen unidos a mí. [5] El discípulo que se mantiene unido a mí, y con quien yo me mantengo unido, es como una rama que da mucho fruto; pero si uno de ustedes se separa de mí, no podrá hacer nada. [6] Al que no se mantenga unido a mí, le pasará lo mismo que a las ramas que no dan fruto: las cortan, las tiran y, cuando se secan, les prenden fuego. Juan 15:4-6 (TLA)

Como podemos ver, el propietario tiene que cortar el árbol ¿Esta bastante claro verdad? Lo bueno de todo esto es que el viñador dijo: déjala un año más.

El punto que tenemos que entender es que Dios no está preocupado por un año nuevo, Dios quiere un nuevo yo, un nuevo usted.

Así que si hemos sido estériles e improductivos, la respuesta razonable para el Señor es la de comprometernos a producir frutos en el 2012. Involucrarnos mas en la iglesia, orar más que nunca, ser más generosos, estudiar la Palabra de Dios más que nunca. Y la próxima vez que el dueño de la viña venga con su solicitud razonable de pedir fruta (que podría ser cualquiera de estos días), con alegría, se le puede dar todo lo que Él desee.

¿Como podemos pagarle al Señor todo lo que ha hecho por nosotros?

Él quiere frutos.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Una Joven Navidad // Lucas 1:28-38



Estimado lector, le invito a pensar acerca de la confianza ya que la historia de hoy es acerca de la confianza. La Biblia dice lo siguiente:

"[5] Pon toda tu confianza en Dios y no en lo mucho que sabes. [6] Toma en cuenta a Dios en todas tus acciones, y él te ayudará en todo. " Proverbios 3:5-6

Cuando pensamos en la historia de la Navidad, podemos ver una historia de confianza. María es el mejor ejemplo de confianza que podemos encontrar en la Biblia; ella era probablemente una adolescente de 16 años que fue visitada por un ángel; generalmente nosotros no confiamos en que los adolescentes estén preparados para responsabilidades grandes. Y por eso es difícil entender cómo es que María estaba preparándose para hacer algo tan grande. Pero allí estaba ella dándonos un gran ejemplo de confianza en el Señor: ella demostró cómo es que debemos confiar en Dios. Esta es la historia:

[28] Y entrando el ángel, le dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor está contigo; bendita eres tú entre las mujeres. [29] Pero ella se turbó mucho por estas palabras, y se preguntaba qué clase de saludo sería éste.    [30] Y el ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios. [31] Y he aquí, concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús.    [32] Este será grande y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de su padre David; [33] y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.    [34] Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto, puesto que soy virgen? [35] Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso lo santo que nacerá será llamado Hijo de Dios. [36] Y he aquí, tu parienta Elisabet en su vejez también ha concebido un hijo; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril. [37] Porque ninguna cosa será imposible para Dios. [38] Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia. Lucas 1:28-38

Los científicos afirman que Lucas era un historiador, y que de hecho habló con testigos oculares antes de escribir todo lo que escribió. Creyendo esto, Lucas podría haber hablado con María cuando ella estaba en sus años cincuenta mas o menos. María le contaba a Lucas la historia de un ángel que habló con ella, y posiblemente también le platicó que se sentía la persona equivocada para la tarea, y de como al final ella puso su fe en Dios. Dios envió un ángel para decirle que ella seria la madre de Jesús, el Hijo de Dios. María le preguntó "¿pero cómo?"

Muchas personas en el mundo todavía hacen esta pregunta "¿cómo es esto posible? ¿Cómo pudo Jesús haber nacido de esa manera?" La cuestión es que estamos acostumbrados a medir las cosas y ser científicos al respecto, y por lo tanto sabemos que es imposible que una virgen de a luz a un niño. Aquí es donde entra en acción la confianza y la fe: ¿estamos dispuestos a creer en un Dios que es toda la ciencia y que está en control de todo y que puede romper las reglas y hacer un milagro si lo quisiera?

Lamentablemente, algunas personas piensan que Dios es sólo un "dios bing bang" que aplaudió y produjo una gran expansión en el tiempo y espacio y que la creación tal como la conocemos es sólo el resultado de una evolución ocurrida durante millones de años. La idea es que este dios creó todo y dejó el resto a la "madre naturaleza", y a la probabilidad. Este dios no quiere involucrarse en la creación, y sólo observa lo que está sucediendo a nuestro alrededor. Muchas personas creen en este tipo de dios. Pero este no es el dios de la Biblia nos presenta.

La Biblia presenta una especie de Dios "sobre- o super-natural". Él no está limitado por las reglas del universo. Si decide tener un hijo de una virgen lo puede hacer si le place. Ese niño seria llamado "Hijo de Dios". El propósito de Jesús era salvar al mundo de sus pecados.

Entonces, ¿por que tanto énfasis el nacimiento virginal? Es que es muy importante resaltar el hecho de María era totalmente humana, y por lo tanto Jesús también era completamente humano, pero al mismo tiempo, era completamente Dios. Si Jesús era un ser humano, esto quiere decir que él sabe exactamente lo que se siente ser un humano con todas las luchas, pero al mismo tiempo Él era Dios; podía caminar sobre el agua; podía curar a un hombre ciego; podía hablarle a una tumba y que un hombre muerto saliera caminando con vida. Pero el Hijo de Dios tenía que ser humano, porque Él vino a morir. Jesús murió en la cruz para pagar por nuestros pecados; alguien tenía que morir, y su misión era la de morir por nuestros pecados.

Adoramos a un Dios que está dispuesto a involucrarse con nosotros, de hecho otro nombre de Jesús es también "Emmanuel" que significa "Dios con nosotros": es decir, nada es imposible, porque Él está con nosotros. Dios sabe lo que enfrentamos porque El era totalmente humano. ¡Qué maravilloso es tener un Dios que se preocupa por nosotros y que le importamos! Pero observemos lo que María dijo: "Yo soy la servidora del Señor y haré todo lo que Él quiera que yo haga".

La Biblia tiene muchas historias acerca de Dios pidiéndole a la gente a hacer algo y la gente siempre termina dando excusas; simplemente no podían hacer lo que Dios quería que hicieran. Sin embargo, vemos a María diciendo: "Voy a hacer lo que Él quiera que yo haga". Podríamos decir que ella no tenía la mas mínima idea en lo que se estaba metiendo; en los próximos meses iba a estar sufriendo todo tipo de cosas: huir, viajar largas distancias, y años más tarde ver a su propio hijo que apenas parece humano porque lo golpearon y esta clavado en una cruz. Ella sabía que El era el Hijo de Dios y lo habían asesinado. Pero ella sabía que ella estaba haciendo lo que Dios le había pedido que hiciera.

¿Pero qué hay de nosotros? ¿Estamos dispuestos a mirar a Dios a los ojos y decirle "yo soy tu siervo, yo iré a donde quieras que vaya, y haré lo que quieras que haga". ¿Estamos dispuestos a confiar en Dios? Observemos lo que María le dijo a Dios: "haz con mi vida lo que quieras". No fue un accidente que Dios haya escogido a María; Jesús creció viéndola orar y confiando en Dios. De esto es de lo que se trata la vida: poner nuestra vida en las manos de Dios y confiar en él.

No olvidemos el ejemplo de Pedro cuando Jesús le preguntó varias veces: "¿me amas?" y Pedro no entendió lo que estaba pasando y dijo "¿Y que hay con los otros discípulos?" Jesús le respondió: "Si yo quiero que vivan hasta que yo regrese, ¿a ti qué?". Practicamente Jesús estaba diciendo "¿qué diferencia hace?", y luego dijo las palabras más importantes: "no te preocupes por ellos, Pedro, tu sígueme".

La relación de Dios con los demás no es asunto nuestro, lo único que importa es nuestra relación personal con él. Es importante que pensemos como María: Señor, voy a confiar en ti, voy a hacer lo que quieres que haga, voy a ir a donde quieras que vaya, y yo seré quien quieras que sea.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Un Santo Dia Festivo // Marcos 2:23-3:06

¿Alguna vez se ha preguntado por qué muchos de nosotros nos quedamos dormidos mientras estamos en la iglesia o durante el sermón? Es probable que sea porque estamos muy cansados, es decir, literalmente estamos cansados ​​físicamente, nuestro cuerpo necesita descansar un poco y cuando nos sentamos quietos durante unos minutos el cuerpo piensa que  queremos descansar. Estamos viviendo en un mundo en constante movimiento 24/7, y vivimos a un ritmo en el que tal vez dormimos 6 horas al día, cuando deberíamos dormir alrededor de 8 o 9 horas. Nuestro cuerpo necesita descansar de todas nuestras actividades, afortunadamente para los judíos, ellos tienen el día de reposo: un día en el que pueden descansar. La historia de hoy se basa en este tema; veamos la enseñanza de Jesús acerca del día de reposo; la Escritura dice lo siguiente:

[23] Un sábado, Jesús caminaba entre los sembrados, y sus discípulos, al pasar, comenzaron a arrancar espigas de trigo. [24] Los fariseos le preguntaron: Oye, ¿por qué hacen tus discípulos algo que no está permitido hacer en sábado? [25] Pero él les dijo: ¿Nunca han leído ustedes lo que hizo David en una ocasión en que él y sus compañeros tuvieron necesidad y sintieron hambre? [26] Pues siendo Abiatar sumo sacerdote, David entró en la casa de Dios y comió los panes consagrados a Dios, que solamente a los sacerdotes se les permitía comer; y dio también a la gente que iba con él. [27] Jesús añadió: El sábado se hizo para el hombre, y no el hombre para el sábado. [28] Por esto, el Hijo del hombre tiene autoridad también sobre el sábado.
[1] Jesús entró otra vez en la sinagoga; y había en ella un hombre que tenía una mano tullida. [2] Y espiaban a Jesús para ver si lo sanaría en sábado, y así tener de qué acusarlo. [3] Jesús le dijo entonces al hombre que tenía la mano tullida: Levántate y ponte ahí en medio. [4] Luego preguntó a los otros: ¿Qué está permitido hacer en sábado: el bien o el mal? ¿Salvar una vida o destruirla? Pero ellos se quedaron callados. [5] Jesús miró entonces con enojo a los que le rodeaban, y entristecido por la dureza de su corazón le dijo a aquel hombre: Extiende la mano. El hombre la extendió, y su mano quedó sana. [6] Pero en cuanto los fariseos salieron, comenzaron a hacer planes con los del partido de Herodes para matar a Jesús. Marcos 2:23-3:06 (DHH).

El sábado es algo bastante importante para los Judíos, porque Dios lo instituyó en los diez mandamientos, los Judíos lo practican el sábado y los cristianos el domingo. Pero el principio es prácticamente el mismo que está escrito en Éxodo:

[8] "Acuérdate del sábado, para consagrarlo al Señor. [9] Trabaja seis días y haz en ellos todo lo que tengas que hacer, [10] pero el séptimo día es de reposo consagrado al Señor tu Dios. No hagas ningún trabajo en ese día, ni tampoco tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tus animales, ni el extranjero que viva contigo. [11] Porque el Señor hizo en seis días el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, y descansó el día séptimo. Por eso el Señor bendijo el sábado y lo declaró día sagrado. Éxodo 20:8-11 (DHH).

El sábado distinguía a los Judíos de todas las personas en el mundo, los Judíos incluso han creado un conjunto de reglas para protegerlo. Por ejemplo se dice que no se debe trabajar en el sábado y eso es precisamente lo que metió en problemas a los discípulos de Jesús. Estas personas convirtieron un santo día festivo en uno de los días más restrictivos. Estas personas parecían no entender de lo que este día se trataba el día de reposo. En este día, todo mundo era igual, no había jerarquías, todo el mundo estaba descansando fuera del trabajo.

También se menciona que este día fue creado para los hombres. Dios nos ama tanto, que nos dio un día libre por semana. Es un día para conectarse con el creador: él quiere que confiemos en el plena y totalmente en el día de reposo. El creador nos conoce y nos está diciendo claramente que nuestro cuerpo fue diseñado para trabajar durante solo seis días y descansar un día. No estamos diseñados para trabajar por siete días. Déjeme preguntarle, ¿cuánto tiempo ha pasado desde que usted tuvo un verdadero día de descanso? Cuando uno descansa, uno tiene tiempo para la familia, para hablar y para mantener una relación con ellos. Es por eso que el sábado fue hecho para el hombre.

Marcos nos dice que en otro día, la gente está buscando a Jesús en el día de reposo, y lo encontraron cerca de un hombre que estaba enfermo de su mano. Inmediatamente la gente sabía que Jesús lo iba a sanar, y que por lo tanto estaría violando la ley. Así que Jesus les pregunta: "¿Es lícito hacer el mal o el bien en el día de reposo". Ellos no pudieron responder. Así que Jesús se enojó! Y yo no creo que alguien quiera ver a Jesús enojado! Él se enojó porque ellos tenían un corazón bastante duro. Inmediatamente, Jesús sanó al hombre de la mano enferma. Por lo tanto, estas personas comenzaron a conspirar para matar a Jesús.



 
¿Cuál es el verdadero significado del día de reposo para nosotros hoy? Es impresionante ver cómo los pequeños dispositivos como teléfonos celulares o computadoras, han hecho que nuestras vidas dependan de la tecnología. Imagínese cómo se sentiría usted si se desconecta del teléfono y de todos los dispositivos durante solo un día. Los expertos dicen que uno se va a sentir más conectado con uno mismo, pero eso es sólo la mitad de la historia, porque si usted toma un día de reposo, uno también esta destinado a conectarse con Dios. Imagínese que cada semana hubiera un día festivo.

¿Qué pasaría si nos tomáramos el día libre? ¿No creemos que Dios puede cuidar de todo lo que normalmente hacemos? ¿Creemos que Dios es capaz? Por supuesto que sí lo es! ¿Por qué no tomamos un descanso, ese descanso que nos permita pasar un rato tranquilo con Dios, con uno mismo, y con la familia? Confiemosle nuestros negocios y asuntos a Dios, pongamos toda nuestra confianza en él, confiemosle todo lo que hacemos, estamos cansados y merecemos un descanso. La Escritura dice:

Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar. Mateo 11:28 (DHH)

Tal vez su vida sea como la mía, sentimos que la vida está girando mucho más rápido de lo que podemos controlar, pero Jesús quiere que nos acerquemos a él. Es una invitación a tener una relación: si estás cansado, frustrado, estresado, ven a Jesús. El pasaje también dice:

Acepten el yugo que les pongo, y aprendan de mí, que soy paciente y de corazón humilde; así encontrarán descanso. Mateo 11:29 (DHH)

Él nos quiere enseñar a vivir; y la verdad es que nosotros tratamos de arreglar todo por nuestra cuenta, y no permitimos que él nos ayude. Él de hecho nos invita a aprender: el quiere estar a nuestro lado y enseñarnos. La ilustración que Jesús usa aquí es la de un buey experimentado que se pone en un yugo al lado de un buey joven y sin experiencia; la enseñanza es que los dos van a caminar juntos hasta que el joven aprenda.

Usted sabe perfectamente que Jesús le ha enviado este mensaje a usted. Él le invita a tomar un descanso y pasar un rato tranquilo juntos; tómese el día libre, tómese un santo día festivo.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Dia de Accion de Gracias: Invitado a la Mesa



Sin duda usted alguna vez ha visto algún cuadro de la santa cena entre Jesús y los doce. Y tal vez usted mismo ha pensado: entre todos los posibles lugares que Jesús pudo optar para ser recordado ¿por qué eligió una mesa? Esta ha sido una pregunta muy interesante para mí, y es que a veces nos preguntamos ¿Por qué no eligió ser recordado como alguien sentado en un trono con mucha gente de rodillas delante de él? ¿Por qué no eligió ser recordado como un juez con gente temblando ante Él? ¿Cuál era el mensaje que Él quería enseñarnos con su elección de ser recordado en una mesa? Hoy vamos a tratar de dar una posible respuesta observando primeramente al Salmo 23, que dice lo siguiente:

[1] El SEÑOR es mi pastor, nada me faltará. [2] En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce. [3] El restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de su nombre. [4] Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento.
[5] Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; has ungido mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. [6] Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del SEÑOR moraré por largos días. Salmos 23:1-6 (LBLA).

Muchas veces nos imaginamos la escena de este pasaje con un pastorcito de ovejas en las llanuras quien reflexiona en su vida y experiencias como pastor. Sin embargo, a medio Salmo se nos cambia la imagen por completo y el salmista comienza a hablar sobre la muerte y los enemigos. Es por eso que creo que David (el salmista) no era un pastorcito cuando escribió esto, creo que lo escribió ya que era de edad adulta, debido a que, como ustedes sabrán, fue también un guerrero que tenía que saber acerca de la guerra, de la muerte, y de sus enemigos. El sabía lo que se sentía al ir a la guerra sin saber si podría volver y ver a su familia nuevamente. Su experiencia confirma lo que habla acerca del valle de sombra de muerte.

También después dice algo que pareciera ser bastante extraño: "preparas la mesa en presencia de mis enemigos". La mayoría de nosotros no pudiéramos entender el significado de lo que está hablando porque no hemos sido criados en el Medio Oriente. El significado que necesitamos entender es el siguiente: en el Medio Oriente, si un hombre nos da la bienvenida a su casa, y prepara un espacio para nosotros en su mesa, en preciso momento en que nosotros nos sentamos a su mesa, el nos esta prometiendo que nos va a defender con su propia vida. Es decir que si nuestros enemigos se aparecen, él tiene la obligación moral de luchar con nosotros hasta la muerte, solo porque él nos dio la bienvenida a su mesa. Ahora bien, si pensamos en la mesa bajo este contexto, esto nos ayuda a comprender un poco más la decisión de Jesús queriendo ser recordado en una mesa. Él quería ser recordado como una persona que nos da la bienvenida a su familia y que está ahí para protegernos. Por favor, lea conmigo la siguiente escritura donde se ve a Jesús sentado a la mesa con sus discípulos, le invito a leerlo con la determinación de que impacte su vida en base a lo que explicamos anteriormente:

[14] Cuando llegó la hora, Jesús y los apóstoles se sentaron a la mesa. [15] Jesús les dijo: ¡Cuánto he querido celebrar con ustedes esta cena de Pascua antes de mi muerte! [16] Porque les digo que no la celebraré de nuevo hasta que se cumpla en el reino de Dios.
[17] Entonces tomó en sus manos una copa y, habiendo dado gracias a Dios, dijo: Tomen esto y repártanlo entre ustedes; [18] porque les digo que no volveré a beber del producto de la vid, hasta que venga el reino de Dios.
[19] Después tomó el pan en sus manos y, habiendo dado gracias a Dios, lo partió y se lo dio a ellos, diciendo: Esto es mi cuerpo, entregado a muerte en favor de ustedes. Hagan esto en memoria de mí.
[20] Lo mismo hizo con la copa después de la cena, diciendo: Esta copa es la nueva alianza confirmada con mi sangre, la cual es derramada en favor de ustedes. [21] Pero ahora la mano del que me va a traicionar está aquí, con la mía, sobre la mesa. Lucas 22:14-21 (DHH).

Cuando ellos reunieron en la mesa fue muy personal, podemos ver que Jesús quería estar con ellos desde hacia mucho tiempo. Estaban tan cerca que Jesús podía ver a todos a los ojos. Jesús tenia una urgencia de estar cerca de estas personas; personas que eran tan comunes como usted y como yo, eran pescadores, cobradores de impuestos, de diferentes orígenes, pero Jesus quería estar junto con ellos a la mesa.

En el pasaje se menciona que Jesús dijo: "esto es mi cuerpo entregado en favor de ustedes". No dice "por culpa de ustedes". El quería hacerlo por nosotros. Es increíble lo mucho que nos ama que hasta se entregó voluntariamente por usted y por mí. Usted y yo sabemos perfectamente cómo somos, y sin embargo el lo hizo por nosotros. Su amor por nosotros, humanos imperfectos, es indescriptible.

Al final de la Biblia, Juan también escribió en el libro del Apocalipsis, que en la visión que tuvo, Jesús escribe algunas cartas. Le escribe a una iglesia en particular en Laodicea, y les dice lo siguiente:

[15] Yo sé todo lo que haces. Sé que no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! [16] Pero como eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Apocalipsis 3:15-16 (DHH).

Normalmente, cuando los predicadores ven este pasaje, a menudo enseñan que cuando estamos fríos espiritualmente (o muertos también) es cuando tenemos que tomar una decisión de ser calientes para que Jesús no nos escupa de su boca. Podría ser que este sea realmente el significado del pasaje. Pero la figura gramatical que se usa es de alguien que está tomando una bebida y tal vez haya otro significado para el pasaje, permítame explicar. Cuando usted come galletas, generalmente le gustaría tomar un refrescante vaso de leche bien fria, ¿verdad? Si usted toma un vaso de leche tibia, como que es algo que no está bien para muchas personas, porque es algo que no es refrescante. Y cuando usted se levanta por la mañana, usted desea experimentar la sensación y aquel sabor de un café bien caliente, ¿verdad? Si usted se toma la taza de café que dejo en la mesa por 20 minutos, entonces hay un grave problema: ya no está caliente, no es nada refrescante. Entonces, pudiéramos sugerir que Jesús estaba diciendo que él quiere tener una relación con nosotros que sea refrescante para él, para que cuando Jesús pruebe el sabor de nuestra relación con Él, le sea algo verdaderamente agradable. Él también dice algo muy importante más adelante en el mismo pasaje:

[20] Mira, yo estoy llamando a la puerta; si alguien oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaremos juntos. Apocalipsis 3:20 (DHH).

Este es el pasaje que la mayoría de los evangelistas utilizan para hacer una invitación a que la gente a acepte a Jesús en su corazon. Este pasaje generalmente se utiliza para invitar a la gente a abrir su corazón a Jesús para que pueda entrar, pero a veces nos olvidamos de que esta carta fue escrita a una iglesia, a un grupo de creyentes: a gente que se supone que ya tiene a Jesús en su corazón! Jesús está diciendo "Estoy tocando la puerta de su iglesia! ¿Me permiten entrar?". ¿No sería triste que Jesús estuviera llamando a la puerta de nuestra iglesia, esperando afuera mientras que nosotros tenemos nuestro programa de alabanzas, adoración y todas nuestras actividades?

Perdóneme si digo una herejía aquí, pero imagine por un momento que usted es Jesús, y que usted ha estado llamando a la puerta de estas personas en la iglesia, y siguen ignorándole desde hace años. Finalmente, alguien abre la puerta, ¿qué haría usted? Yo, en mi caso, limpiaría la casa y pondría algo de orden, pondría a todos en su lugar. Pero Jesús no dijo eso, de hecho, lo que nos dice es: "abre la puerta, y nos sentaremos en la mesa, seamos familia nuevamente". Él sólo quiere sentarse a la mesa con nosotros y tener una relación de compromiso, una relación significativa con Su iglesia, es decir, nosotros.

Puede ser que nosotros ya estemos viviendo en Cristo Jesús, pero lo hemos dejado afuera; hoy es el día en que debemos abrirle la puerta. Tal vez lo tenemos afuera tocando a la puerta debido a que sabemos lo que tenemos que hacer, y no lo hacemos; o tal vez estamos viviendo de una manera que sabemos que no es la manera que él quiere que vivamos. Sea lo que sea, tenemos que ir a la puerta y abrirle el día de hoy, Él promete sentarse a la mesa con nosotros y hacernos parte de la familia nuevamente; promete luchar con nosotros y en favor de nosotros al grado de protejernos con su propia vida: dejémosle entrar, hagámoslo ahora mismo, en este preciso instante.

En el dia de Accion de Gracias, Cristo esta tocando a nuestra puerta, quiere entrar y cenar con nosotros: si tenemos oidos, entonces escuchemos su llamado.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Generosidad con Acción de Gracias // 2 Corintios 8:1-7

Si usted y yo creemos que hemos sido creados a la imagen de Dios, entonces, ¿no cree usted que él probablemente halla implantado esa característica en nosotros? Puede ser que sí, aunque la tengamos ahí escondida. Piense en esto: si Dios está constantemente transformando nuestras vidas, ¿no  seria justo considerar la generosidad como parte de esas cosas que deseamos transformar para bien?

Es verdaderamente alarmante que solo el 5% de las personas que dicen ser seguidores de Jesús practican aquello que la Biblia llama “diezmo”? El diezmo, de acuerdo al antiguo testamento, consiste en devolverle a Dios una décima parte de lo que Él nos ha dado. Si entonces decimos que somos verdaderos adoradores de Dios, deberíamos tener muy en cuenta la generosidad como parte de nuestra vida Cristiana.

La cuestión es que en algunas iglesias solo se nos alienta y motiva a dar generosamente, olvidando que hay algo que tiene que pasar antes de poder empezar a ser generosos. La historia de hoy nos ayudará a entender esto. Leamos lo que el apóstol Pablo escribió a los cristianos de Corinto, entendiendo que dada la situación de la ciudad en ese período de tiempo, existe una alta probabilidad de que estos cristianos fueran ricos, exitosos, o vivieran en opulencia. Pablo escribe desde Jerusalén en tiempos de persecución, en tiempos de dolor y necesidad entre los Cristianos perseguidos, y él está pidiendo ayuda. Por alguna razón que no vamos a discutir aquí, los Corintios consideraban a los Macedonios como bárbaros, sin embargo, Pablo escribe esta carta a los Corintios y les cuenta  una historia acerca de los Macedonios.

[1] Ahora, hermanos, queremos que se enteren de la gracia que Dios ha dado a las iglesias de Macedonia. [2] En medio de las pruebas más difíciles, su desbordante alegría y su extrema pobreza abundaron en rica generosidad. [3] Soy testigo de que dieron espontáneamente tanto como podían, y aún más de lo que podían, [4] rogándonos con insistencia que les concediéramos el privilegio de tomar parte en esta ayuda para los santos. [5] Incluso hicieron más de lo que esperábamos, ya que se entregaron a sí mismos, primeramente al Señor y después a nosotros, conforme a la voluntad de Dios. [6] De modo que rogamos a Tito que llevara a feliz término esta obra de gracia entre ustedes, puesto que ya la había comenzado. [7] Pero ustedes, así como sobresalen en todo -en fe, en palabras, en conocimiento, en dedicación y en su amor hacia nosotros-, procuren también sobresalir en esta gracia de dar. 2 Corintios 8:1-7 (NVI).

En el verso [2] podemos ver claramente el ambiente donde se desarrolla la generosidad de los macedonios: a) en medio de gran crisis personal, se desborda de alegría; b) en condiciones de pobreza extrema, son ricos en su generosidad. Como dice el verso [1], esto sólo es posible por la gracia transformadora de Dios. La gracia de Dios transformo a los macedonios de manera que fueron diferentes a los demás.

Lamentablemente, todos nosotros nacemos siendo egoístas, desde los primeros días de nuestra vida hemos sabido llorar y gritar para llamar a la atención de la gente que necesitábamos. Se supone que con el tiempo deberíamos crecer y superar eso, pero la verdad es que muchos todavía estamos así, y sólo la gracia de Dios puede transformar nuestros corazones para que podamos, por fin, empezar a preocuparnos también por los demás.

En el versículo [5], encontramos que ellos mismos se dieron primeramente al Señor. Y esta es la clave: el primer regalo de un corazón generoso es cuando nos regalamos al Señor, es hasta entonces que la verdadera generosidad empieza. Cuando verdaderamente nos entregamos a Jesús, todo parece volverse secundario. Una vez que las vidas de aquellos macedonios estaban en las manos de Dios, una vez que todo lo que tenían estaba en las manos del Señor, entonces empezaron a hacer lo que Dios quería que hicieran. Si alguien trataba de impedir que ellos dieran generosamente, ellos se sentían ofendidos. Incluso en el versículo [4], vemos que prácticamente ellos tuvieron que rogarles para que les recibieran su ofrenda. Pablo y sus compañeros probablemente dijeron a los macedonios "a ver, momento, se supone que nosotros somos los que les deberíamos de dar una ofrenda a ustedes!", sin embargo ellos les rogaron "por favor, permítanos ayudarles".

A la luz del verso [2] y del hecho de que se entregaron al Señor, la ecuación cambió por completo, las matemáticas cambiaron. Ellos sabían que estaban a salvo en manos del Señor. No como algunos de nosotros que pensamos que podemos salir adelante y mantenernos o depender de algunas pertenencias, títulos, negocios, o ahorros que tenemos por ahí guardados. Y es que no podemos entender cómo una persona en situación de pobreza extrema puede ser generosa, pero Pablo de hecho nos dice exactamente cómo ocurre: ellos dieron todo lo que pudieron, e incluso más allá de su capacidad.

Sacrificio, es la única forma en que podemos hacerlo. Si vamos a ser generosos, tenemos que hacer un sacrificio. Pensemos en lo siguiente: ¿cuándo fue la última vez que hicimos un sacrificio personal sólo con tal de ser generosos? En parte, ser generosos consiste en tomar algunas decisiones en nuestra vida.

Debemos entregarnos a Dios en primer lugar. Tiene que ser siempre en ese orden; se inicia con el corazón, y todas las piezas del rompecabezas empiezan a caer en los lugares correctos. Es tiempo que demos nuestras vidas a Jesús.

sábado, 29 de octubre de 2011

Momentum, Energía, y Aleatoriedad: La Luz en la Cruz // Marcos 4:21-25, Mateo 5:14-16

¿Cuán grande es nuestro Dios? Pensemos acerca de los problemas que hemos tenido esta semana. Ahora, también reflexionemos en la siguiente pregunta: ¿Que es lo que todos estos problemas nos dicen acerca de nuestro entendimiento de Dios? De todas estas cosas, ¿hay algo que sea demasiado grande para que Dios no lo pueda manejar? Espero que nuestra respuesta sea ¡No!

En este pasaje Jesús continuaba hablando de los secretos acerca del Reino de Dios. La escritura nos dice lo siguiente:

[14] "Ustedes son la luz de este mundo. Una ciudad en lo alto de un cerro no puede esconderse. [15] Ni se enciende una lámpara para ponerla bajo un cajón; antes bien, se la pone en alto para que alumbre a todos los que están en la casa. [16] Del mismo modo, procuren ustedes que su luz brille delante de la gente, para que, viendo el bien que ustedes hacen, todos alaben a su Padre que está en el cielo. Mateo 5:14-16


Hoy voy a tratar de caminar con usted a través de este pasaje para que juntos podamos ver debajo de la superficie, y comprender el punto que Jesús quiere transmitirnos.

Aqui Jesús está hablando a sus discípulos y a sus mas allegados: aquellas personas que estaban buscando mas acerca de la verdad. El tema de hoy puede parecer difícil de entender para algunos, pero si usted es uno de esos que siempre están sedientos de la verdad y que siempre quiere saber más, el Señor está dispuesto a hablarle porque usted quiere aprender.

En el pasaje Jesús está diciendo básicamente: el reino de Dios es como una lámpara, y cuando uno lleva una lámpara a la habitación uno no la pone debajo de un cajón, por el contrario uno la pone encima de algo.

Cuando nosotros vemos oscuridad o vemos maldad, siempre tratamos de apuntar a otros y culparles de la oscuridad: el gobierno, las escuelas, los medios de comunicación. Tratamos de señalar con el dedo, pero la verdadera razón de que la casa este a oscuras, es que la lámpara esta escondida.

Dallas Willard dijo lo siguiente: "Debemos suponer que los fracasos existen, no a pesar de lo que hacemos, sino precisamente por lo que hacemos". (Dallas Willard, The Divine Conspiracy: Redescubriendo nuestra vida escondida en Dios)

Tal vez el mundo es oscuro debido a lo que la iglesia está haciendo, o mejor dicho, debido a lo que la iglesia no está haciendo. ¿De que manera estamos escondiendo la lámpara?

La luz es definida como una entrega constante de pequeños paquetes llamados fotones. Estos pequeños fotones son la esencia de la luz y tienen tres propiedades muy importantes: son aleatorios, contienen energía y tienen momentum. Esto significa que la luz puede ir a cualquier parte, que está llena de pequeñas chispas de energía, y que está siempre en movimiento. Es interesante cómo Jesús explicó la importancia de ser una luz usando sólo el ejemplo de una lámpara, en lugar de fotones. Tal vez si los discípulos fueran científicos, Jesús podría simplemente decirles que el reino de Dios es como luz, y entonces ellos sabrían de inmediato que el reino de Dios es una fuente constante de bendiciones, energizante, que llena todo el mundo en todas direcciones; y lo mas importante: que el Reino de Dios tiene momentum. Sin embargo, no importa cómo nos lo expliquen, el problema sigue siendo el mismo ayer y hoy en día: estamos escondiendo la luz.

La luz esta oculta porque no compartimos nuestra historia con Jesús. Muchos de nosotros hemos mal interpretado el significado de Mateo 5:16, y nos falta ver el cuadro completo. Por décadas hemos estado viviendo lo que se conoce como "estilo de vida evangelístico": es el vivir una buena vida Cristiana de tal manera que otras personas vean cómo uno vive y se acerquen a Jesús. Es decir que, nuestro estilo de vida atrae a nuestros compañeros de trabajo y familia a un encuentro con Jesús.

Que quede claro que no hay nada de malo en vivir una buena vida Cristiana, el problema es que a pesar de nuestra vida Cristiana ejemplar aún tenemos amigos y vecinos que viven en oscuridad, debido a que estamos escondiendo la lámpara. Probablemente nuestros vecinos, amigos y familiares piensen "Me gustaría ser como ellos. Ellos son mejores personas que yo". Pero la verdad es que no somos mejores que nadie, es la presencia de Jesús lo que hace las cosas diferentes, pero ellos nunca lo van a ver de esa manera si seguimos viviendo así: nada va a cambiar si seguimos escondiendo la luz debajo de la mesa.

Algunas veces la luz se esconde detrás de las ventanas de la iglesia. La gente puede ver que hay una luz en el interior, pero no pueden ver cómo es en realidad, a menos que entren a la iglesia. Por supuesto, si alguien entra en la iglesia, nosotros estaríamos encantados de hablar sobre Jesús, no es cierto? Pero lo más triste es que la gente que verdaderamente necesita de Jesús nunca va a entrar a la Iglesia. Pueden pasar por enfrente del edificio, mirar a través de las ventanas, pero este es el último lugar donde ellos quisieran estar. El punto es que Jesús no esperó a que la gente viniera a él, Jesús salió a buscarlos. Si tomamos en serio el ser la luz en nuestra ciudad, entonces tenemos que llevar el evangelio fuera de la iglesia.

Pero increíblemente hay otra manera en que ocultamos la luz, y esta acontece cuando tratamos de hacer que la historia de Jesús se acomode con la sociedad moderna: rebajamos con agua el Evangelio con tal de no ofender o hacer sentir mal a nadie. Pero la gente necesita saber la verdad!

Si no estamos dispuestos a decirle a la gente la verdad, entonces nunca tendrán la verdad que los hara libres. No podemos rebajar el Evangelio para que sea socialmente aceptable. Jesús dice que tenemos que poner la luz en un candelero para que todos en la casa puedan verla.

Pero aquí hay una reflexión personal interesante: tal vez Jesús estaba hablando acerca de la cruz. Pienso que fue en la cruz donde Jesús demostró como el reino de Dios es en realidad. Sí, allí en esa cruz tan terrible, en ese día del juicio... Ese si fue un día de juicio en verdad, no como el que supestamente iba a ocurrir hace un par de semanas atrás. A esta persona le falló la fecha, aun a pesar de que él estaba absolutamente convencido de ello, sin embargo Jesús no vino. Y no malinterpretemos, porque Jesús de hecho está por venir en cualquier momento. Y estoy seguro de que si Jesús estuviera presente aquí hoy, no nos diría cuando regresa, pero de seguro él nos dirá "vale mas que estén preparados!". Sera como un ladrón en la noche, y todos tenemos que estar preparados.

En aquel momento de juicio en la cruz, la ira de Dios cayó sobre Jesús por culpa de nuestros pecados. Su muerte fue tan horrible porque era necesario para pagar por nuestro horrible pecado. Jesús tuvo que ser levantado y morir por nosotros. Aquella tarde los mas allegados a Jesús comenzaron a entender lo que el reino de Dios es en realidad, entendieron el significado de ser luz en la oscuridad.

Curiosamente, Jesús murió a media tarde, cuando el sol se suponía que debería brillar e iluminar todo el lugar. Sin embargo, los escritores nos cuentan que el sol se oscureció, y estaba oscuro en la tierra, y aquel viernes por la tarde, la Luz del mundo fue levantada en la cruz, para que todo el mundo tuviera luz en la oscuridad.

Jesús dijo: ¿quieren saber cómo es el reino de Dios? Es como una luz que alumbra en la oscuridad del mundo.

Así que si usted está viviendo en la oscuridad, Jesús quiere iluminar su vida. El ha estado buscándolo a usted, de hecho él le está llamando ahora mismo. Vengamos a Jesús, vengamos a disfrutar de la luz hoy, vengamos ya.

Ver predica aqui:

sábado, 3 de septiembre de 2011

Trabaje duro // Colosenses 3:22-4:1


A manera de chiste siempre me he preguntado... en el día del trabajo, ¿por que no lo celebramos trabajando como si fuera un día normal y tal vez con una hora extra? ¿Por qué de hecho nos tomamos el día libre? Se me hace raro.

Bueno, vamos a estudiar lo que dicen las Escrituras sobre el trabajo. Éxodo 20:9-10 dice:

"[9] Seis días trabajarás y harás toda tu obra, [10] mas el séptimo día es día de reposo para el Señor tu Dios; no harás en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que está contigo." (LBLA)

Para algunos de nosotros, el trabajo es algo que tenemos que hacer. Anhelamos el día en que ya no tengamos que trabajar. Sin embargo, el trabajo no es algo malo. El trabajo es una manera de glorificar a Dios. Para demostrar esto, veamos lo que el apóstol Pablo escribió:

"[22] Ustedes, esclavos y esclavas, deben obedecer en todo a sus amos aquí en la tierra. No lo hagan para quedar bien con ellos, y sólo cuando los estén mirando. Más bien, háganlo con sinceridad y por respeto al Señor. [23] Todo lo que hagan, háganlo de buena gana, como si estuvieran sirviendo al Señor Jesucristo y no a la gente. [24] Porque ya saben que Dios les dará, en recompensa, parte de la herencia que ha prometido a su pueblo. Recuerden que sirven a Cristo, que es su verdadero dueño. [25] En cambio, todo el que haga lo malo será castigado, según lo que haya hecho, porque Dios no tiene favoritos.
[4:1] Los que tienen esclavos, deben ser amos justos y tratar bien a sus esclavos. Recuerden que en el cielo también tienen un Amo, que es el Señor Jesucristo." Colosenses 3:22-4:1 (TLA)

Esto fue escrito en tiempos donde existía la esclavitud. Si esto aplicaba para las personas que no tenían otra opción mas que trabajar, ¿cuánto más aplica para nosotros que si tenemos la opción?

Pablo nos está abriendo los ojos para ver que, de hecho, el trabajo es una manera de glorificar a Dios. Y si usted es sincero acerca de su compromiso de seguir a Dios, entonces, puede estar seguro de que su trabajo actual será una gran oportunidad para demostrar su compromiso.

En el idioma original, la palabra "trabajo" implica atención. Es decir que si usted se va a trabajar, es necesario que escuche lo que se le esta pidiendo que haga. Cuando usted trabaje siempre escuche; y si su jefe le dice "obedece", hay que hacerlo, de acuerdo a lo que nos dice Pablo.

Esto sólo se refiere a nuestros patrones terrenales. Pero si se nos pide que hagamos algo inmoral o algo ilegal, debemos siempre obedecer primeramente a Dios, nuestro verdadero patron.

¿Sabía usted que 3 de cada 4 personas confiesan perder el tiempo en el trabajo por lo menos 2 horas al día. A tal grado hemos llegado que en nuestros días la gerencia tiene que instalar cámaras de video para vigilar a las personas en el trabajo y asegurarse de que trabajen. Sin embargo, Pablo dice que no debemos trabajar porque estamos siendo observados, ni para complacer a nuestros supervisores, sino que debemos trabajar con todo nuestro corazón, como para el Señor.

Pablo también nos revela un misterio: él dice que el trabajo es tan sagrado como cualquier otra cosa que hacemos para el Señor. En otras palabras, no hay una separación de mi vida secular y mi vida espiritual: debemos de vivir para el Señor en todo lo que hacemos. Si centramos nuestras vidas en vivir para el Señor, entonces todo va a cambiar, y de hecho tendremos una preciosa herencia.

¿Ha notado que cuando queremos hacer alguna trampa en el trabajo, siempre nos sale mal? Otras personas siempre se salen con la suya, pero nosotros no. Esto es porque el Señor lo quiere así. Porque nosotros estamos para agradar a Dios, y sin embargo, nosotros tratamos de engañar a Dios; eso nunca va a suceder. Recordemos que, si nosotros hacemos todo lo que hacemos con entrega y dedicación, estaremos glorificando al Señor.

Ahora, los amos y patrones, también tienen que ser justos. Es necesario darse cuenta de que las  personas no son de su propiedad. Es necesario recordar que usted no es realmente el superior. También tienen un Amo en los cielos. Aquellos de ustedes que tienen autoridad son responsables.

Algunos de nosotros tenemos el privilegio de tener personas que supervisar. Pero este privilegio viene la responsabilidad de proporcionar a los demás lo que es justo, recordando que servimos a un Señor Mayor. Si los tratamos con respeto, con cuidado, con honestidad, con amor, en la forma en que nuestro Padre Celestial nos trata a nosotros, estas personas nos darán su compromiso personal.

Pablo dijo, trátenlos bien, sean justos, recuerden que tienen un Maestro en el cielo.

Estudios recientes muestran que solo 1 de cada 4 personas encuentra satisfacción en lo que hace. Eso significa que usted podría ser uno de los que trabajan porque hay que pagar las cuentas. Y si somos una de esas personas, tenemos que entender lo que Pablo nos enseña: cuando vamos al trabajo, el punto no es realmente nuestro patrón, ni siquiera es el trabajo que hacemos, el punto es darle la gloria a Dios .

En realidad no trabajamos para la empresa que nos da nuestro cheque. De hecho trabajamos para el que nos creó. Trabajamos para el que nos dio la vida. Si realmente entendemos que trabajamos para dar gloria a Dios con nuestros dones, talentos, y con nuestro trabajo, hasta entonces vamos a poder encontrar la plenitud en él, porque ahora trabajamos para darle la gloria a Dios.

Me pregunto que pasaría si todos fuéramos a trabajar siendo conscientes de la presencia de Dios en cada cosa que hacemos, por mas pequeña que parezca. Creo que nuestro día sería más productivo, y al final, nos iríamos a casa mucho más satisfechos, porque nuestro objetivo ese día fue poner una sonrisa en el rostro de Aquel que nos creó.

domingo, 3 de julio de 2011

Confia en Su Tiempo / Marcos 5:21-43

Con los años he descubierto que Dios usa caminos rotos, para llevarnos a Dios. Esta mañana quiero llevarle al pasado, en la orilla del mar de Galilea,  experimentar el dolor, el pánico y la desesperación de un padre que encuentra en Jesús todo lo que había estado buscando.

Vaya conmigo a Marcos 5, y vamos a empezar a leer en el versículo 21:

"[21] Jesús llegó en la barca al otro lado del lago y se quedó en la orilla, porque mucha gente se juntó a su alrededor.
   [22] En ese momento llegó un hombre llamado Jairo, que era uno de los jefes de la sinagoga. Cuando Jairo vio a Jesús, se inclinó hasta el suelo [23] y le rogó:
    --Mi hijita está a punto de morir. ¡Por favor, venga usted a mi casa a poner sus manos sobre ella, para que sane y pueda vivir!
   [24] Jesús se fue con Jairo. Mucha gente se juntó alrededor de Jesús y lo acompañaron. [25] Entre la gente iba una mujer que había estado enferma durante doce años, pues perdía mucha sangre. [26] Había gastado en médicos todo el dinero que tenía, pero ellos no habían podido sanarla; más bien, la maltrataron más. Cada día se ponía más enferma.
   [27-28] La mujer había oído hablar de Jesús, y pensaba: "Si tan sólo pudiera tocar su ropa, sanaría". Por eso, cuando vio a Jesús, se abrió paso entre la gente, se le acercó por detrás y le tocó la ropa. [29] Inmediatamente dejó de sangrar y supo que ya estaba sana.
   [30] Jesús se dio cuenta de que había salido poder de él. Entonces miró a la gente y preguntó:
    --¿Quién me tocó la ropa?   
[31] Sus discípulos le respondieron:
    --¡Mira cómo se amontona la gente sobre ti! ¿Y todavía preguntas quién te tocó la ropa?
   [32] Pero Jesús miraba y miraba a la gente para descubrir quién lo había tocado. [33] La mujer, sabiendo lo que le había pasado, fue y se arrodilló delante de él, y temblando de miedo le contó toda la verdad.
   [34] Jesús le dijo:
    --Hija, has sido sanada porque confiaste en Dios. Vete tranquila.
   [35] Jesús no había terminado de hablar cuando llegaron unas personas de la casa de Jairo y le dijeron:
    --¡Su hija ha muerto! ¿Para qué molestar más al Maestro?
   [36] Jesús no hizo caso de lo que ellos dijeron, sino que le dijo a Jairo:
    --No tengas miedo; solamente confía.
   [37] Y sólo permitió que lo acompañaran Pedro y los dos hermanos Santiago y Juan. [38] Cuando llegaron a la casa de Jairo, vieron el alboroto y que la gente lloraba y gritaba. [39] Entonces Jesús entró a la casa y les dijo:
    --¿Por qué lloran y hacen tanto escándalo? La niña no está muerta; sólo está dormida.
   [40] La gente se burló de Jesús. Entonces él hizo que todos salieran de allí. Luego, junto con los padres de la niña y los tres discípulos, entró al cuarto donde ella estaba. [41] La tomó por la mano y le dijo en idioma arameo:
    --¡Talitá, cum!
    Eso quiere decir: "Niña, levántate". [42] En ese mismo instante la niña, que tenía doce años, se levantó y comenzó a caminar. Cuando la gente la vio, se quedó muy asombrada.
   [43] Jesús ordenó que no le contaran a nadie lo que había pasado. Después mandó que le dieran de comer a la niña." Marcos 5:21-43 (TLA)

Imagine por un momento que usted es Jairo. Había tenido una noche larga y pesada. Se quedó sin poder hacer nada más que ver la vida de su hija esfumarse. El sueño se le había espantado. Usted le ha gritado a Dios que le dé un milagro e hizo toda clase de promesas al respecto, pero fue en vano.

En un momento de debilidad, un pensamiento cruzó su mente: "Pide ayuda a Jesús." Pero este pensamiento salió tan rápido como había entrado. Jesús es increíble, sin duda, pero es muy problemático. El arruino un servicio de adoración hace unos días al enfrentarse con un demonio de en medio de la congregación. Los religiosos ya lo habían etiquetado como "es del diablo". No importa cuán desesperado estuviera Jairo tuvo que recordar quién era. Él era el jefe de la sinagoga. Si él fuera a Jesús, ¿qué pensaría la gente? Además, la última vez que había oído de Él, Jesús había salido de la ciudad.

En medio del peor día de su vida, comenzaron a circular rumores de que unos barcos se habían visto en el horizonte, y parecía que Jesús venía a puerto. En este punto, Jairo se lanza corriendo a la costa para encontrar a Jesús. Tan pronto como el barco toca el muelle, Jairo se apresura a Jesús y lo lanza a sus pies clamando: “Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá.”

En este punto le importaba poco lo que se pudiera pensar de él. Su pequeña hija se estaba muriendo, y sólo Jesús podía salvarla. ¿Lo que es tener buena suerte no? El tiempo de Jesús era perfecto. Llegó justo a tiempo.

A medida que se abrían paso por la ciudad una multitud enorme le seguía. Todo el mundo se sorprendió al ver a Jairo y a Jesús caminando uno al lado del otro. Jesús se abría paso entre la multitud y de repente, se detuvo y miró a su alrededor. Él exclamó: "¡Quién me ha tocado!" ¿Puede usted imaginarse lo que Jairo estaba pensando?: "¿a quién le importa? vámonos, vámonos, mi hija se está muriendo". Pero Jesús se mantiene firme y continúa buscando. Uno de los discípulos habla y dice: "Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quién me ha tocado?"

Pero Jesús sabía que algo estaba pasando: poder sanador había sido liberado de su cuerpo. Como Jesús se esperó, Jairo estaba en estado de pánico. Finalmente, tímidamente una mujer salió de entre la multitud, y cayó a sus pies. Ella confesó que había estado enferma durante años y que había llegado hasta donde estaba Jesús y tocó su ropa y que estaba sana. Jesús miró profundamente en sus ojos y dijo: "Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote."




Mientras Jesús estaba hablando, Jairo reconocido a algunos de sus amigos abriéndose paso entre la multitud. Viendo las caras se podía saber que tenían malas noticias. Uno de ellos habló en privado con Jairo y dio la peor noticia que un padre podía recibir. Él le dijo: "Tu hija ha muerto; ¿para qué molestas más al Maestro?".

¿Puede usted imaginarse los sentimientos en ese momento? Algunos de ustedes pueden. Debo admitir que yo no puedo. He caminado en este valle de sombra de muerte con unos amigos muy queridos como hermano en Cristo y amigo, pero no tengo ni idea de cómo se siente.

En la preparación de este post, me encontré con un blog titulado "El duelo papás: el proyecto", creado por Kevin Farley, de Illinois. Lamentablemente, Kevin perdió a dos hijos en un lapso de dieciocho meses. En un esfuerzo por lidiar con su propio dolor y ayudar a otros padres que estaban sufriendo de la misma manera, él comenzó a contar su historia y compartir los sentimientos con otras personas que estaban sufriendo. En junio del año pasado, Kevin escribió sobre las emociones que sintió después de la muerte de sus hijos. Él escribió:
Los padres que han sufrido como nosotros:
  • Se enojan consigo mismos por no ser capaz de proteger a sus hijos.
  • Se enojan porque la vida, tal como la conocían, se ha ido.
  • Se enojan con Dios por permitir que la pérdida sucediera.
  • Se enojan porque el mundo se sigue su curso después de su pérdida, como si nada. "Mi hijo ha muerto, ¿cómo puede el mundo seguir adelante?"
  • Están enojados con las personas que estuvieron envueltos en la muerte de su hijo.
  • Están enojados porque algunas personas a su alrededor sólo quieren que uno lo "supere y vuelva a su antigua vida".
  • Están enfadados porque han perdido el control de sí mismos y de sus emociones.
  • Ellos están enojados con sus empleadores por no entender que su desempeño en el trabajo ha sido afectado de por vida y que no son la misma persona que antes. Es difícil preocuparse por cosas que ya no parecen tener importancia.
  • Están enfadados porque han perdido la esperanza y parece que no pueden encontrarla.

Creo que estas ideas de Kevin podrían darnos una idea de la avalancha de emociones que Jairo debió haber sentido. Sospecho que en su mente Jairo trataba de razonar lo siguiente: Por que Jesús tuvo que detenerse y hablar con esa mujer. Ella ya había sido sanada y punto. Él podría volver a buscarla después, pero por ahora ¿mi hija qué? mi niña, está muerta.

¿Te has sentido como si Dios llegara demasiado tarde? ¿Alguna vez has cuestionado sus tiempos? O peor aún ¿has puesto en tela de juicio su preocupación y cuidado por ti? Sospecho que todos nosotros en algún momento hemos mirado hacia arriba, al cielo, con dolor y confusión, y tal vez hasta ira y frustración.

Mientras que todas estas emociones se incrustan en Jairo, Jesús se voltea y le dice directamente y con firmeza:

"No temas, cree solamente".

Jesús lo tenía todo bajo control. Realmente nada había cambiado en lo que a él se refería. La niña iba a estar bien, pero Jairo no lo sabía, por lo que Jesús capturó su atención y le dijo:

NO TENGAS MIEDO.

O en otras palabras, no pierdas el control, no te asustes, no dejes que tus emociones te dominen. En términos científicos, Jesús estaba hablando del mecanismo de defensa "lucha o huida". Sospecho que Jesús le estaba hablando a esa adrenalina y las emociones que te golpean como una tonelada de ladrillos cuando algo va mal, muy mal.

Todos nosotros conocemos muy bien las garras del miedo y el terror en nuestras vidas, lo hemos vivido aquí en carne propia. Jesús lo miró a los ojos y dijo: "No temas, cree solamente".

Uno de mis versículos favoritos se encuentra en el Salmo 56. Fue un salmo que David escribió recordando su huida del rey Saúl, y viviendo entre la gente de Gath, la cual no sabía si podía confiar en ellos. La historia se encuentra en 1 Samuel 21.

En esta honesta confesión, el salmista David escribió:

"En el día que temo, Yo en ti confío." Salmo 56:3
“Cuando tengo miedo, confío en ti. “ (DHH)

No puedo decirle cuántas veces en mi vida, a la hora de los problemas, sentí miedo en lo más profundo de mi corazón y mi alma, al grado que me he ido a dormir por la noche susurrando esta oración en voz baja. "Cuando tengo miedo, voy a confiar en ti."

Seguir a Jesús no nos hace inmunes al miedo, pero nos da un lugar hacia donde correr a refugiarnos. Podemos llevar nuestros miedos a Jesús. En agosto del 2004, Joel Contreras y Karina Moreno lanzaron un disco en conjunto con el grupo Rojo el cual contiene un canto titulado "Mi torre fuerte." El coro contiene estas palabras: "...en mi angustia eres fiel, Señor…" Le sugiero que confíe en la fidelidad de Jesús.

Usted puede tener miedo, pero usted no tiene que quedarse viviendo en su miedo. Creamos en Jesús. Confíale solo a Él tu vida y tus circunstancias.

NO TENGAS MIEDO, SOLO CREE

Jesús miró a los ojos y al corazón de este hombre que tenía el corazón destrozado, en esencia, le dijo: cree en mí; confía en mí, todo va a estar bien.

 Jairo vino a Jesús con fe creyendo que Jesús podía tocar a su hija y ella iba a ser sanada, pero ahora, en este preciso momento en la historia, Dios lo estaba estirando (estresando). ¿Habría suficiente fe y confianza en Jesús para creer que su hija muerta iba a estar bien?

 Inmediatamente Jesús, Jairo y el círculo íntimo de Jesús: Pedro, Santiago y Juan partieron hacia la casa. Al llegar pudieron escuchar el sonido desgarrador de luto. Algunos de ustedes conocen esos sonidos muy bien. Me ha tocado estar sentado en una sala de espera cuando llega una noticia de muerte. Me ha tocado estar en salas funerarias con adolescentes gritando y lamentando la muerte repentina de su amigo. En Israel, los lamentos y sonidos de dolor eran parte fundamental de la cultura.

Jesús a su llegada se enfrenta a los llorones y reprendiéndolos les dijo:

 "¿Por qué tanto alboroto y llanto? La niña no está muerta sino dormida. "

 En respuesta, la gente se rió de Jesús, creyendo que era un predicador medio piraton que había perdido el sentido de la realidad. Jesús vacía la casa, excepto por la madre y el padre de la niña y sus tres amigos más cercanos.

 Al entrar en la habitación, Jesús fue al lado de la niña. Con ternura y amor en su voz, él la tomó de la mano, y dijo: "Niña, a ti te digo: levántate." Ante el asombro boquiabierto de todos en la sala excepto Jesús: la niña se puso de pie. Me la imagino corriendo a su madre y su padre. ¿Puede visualizar las lágrimas de alegría y asombro en los ojos de Jairo mientras la abrazaba con fuerza? Ella estaba viva. Jesús les dijo que fueran a buscar algo de comer, y por cierto, por favor no le digan a nadie lo que pasó. (Seguramente!)

En aquel momento de desesperación y desconsuelo, Jesús dijo: "Muchacha, a ti te digo: Levántate." Este fue un momento de esos en los que Jesús dice: “a ti te digo”. La niña se levantó por el poder y la presencia de Jesucristo. No olvidemos las palabras que le susurró a Jairo en el momento más oscuro de su vida. "¡No tengas miedo, cree!"

Entonces, ¿Cuál es su condición en este dia? ¿Dónde estamos como seres humanos el día de hoy? ¿Su vida es presa del pánico? ¿Se enfrenta a un reto demasiado grande? ¿Hay problemas en su familia que parecen no tener solución? ¿Nuestros niños están creciendo en un mundo lleno de inmoralidad y falta de valores? ¿Parece que la batalla está perdida? ¡Tenemos que luchar sin ningún temor al fracaso! Hoy es el tiempo de Dios. Jesús dice "¡No tengas miedo: cree, cree en mí!"

Cada dia enfrentamos una batalla en ámbitos espirituales y con consecuencias eternas.  Es nuestra oportunidad de trabajar sin miedo en contra de la inmoralidad y contra la falta de principios bíblicos.

Ha llegado el momento de que enfrentemos nuestros miedos. Hoy es el tiempo de Jesús. Tal vez parezca demasiado tarde, pero desde la perspectiva de Jesús, todo está perfecto y listo.  Hagamos historia, arrebatemos el futuro.

El futuro de nuestra comunidad no será conquistado por hombres y mujeres con miedo, o por aquellos que se esconden en las comodidades de su vida. No, el futuro va a ser conquistado por los que guardan las palabras de Jesús, esas palabras que van en contra de todas leyes de la probabilidad y posibilidad "¡No tengas miedo: cree, cree en mí!"

domingo, 12 de junio de 2011

¿Por que tenemos tanto miedo? // Marcos 4:35-41


Durante los últimos diez años, ¿cuáles han sido algunos de tus momentos decisivos?

Esta semana me topé con la página web: Listverse.com, la cual contiene listas de los diez mejores en diferentes categorías. Ahí encontré un artículo acerca de los momentos más decisivos en los últimos diez años.

Por ejemplo, en el ámbito de la literatura, para aquellos de ustedes que les encanta leer, se puede pensar solo en un libro (o una serie de libros): HARRY POTTER. En 1997, J. K. Rowling era una autor desconocida tratando de conseguir que su libro fuese publicado. Hoy es la única autor multimillonaria en el planeta tierra. Ella cambió la cara de la literatura infantil de toda una generación.

En el mundo de la música, el momento decisivo no fue un artista o un estilo de música, sino más bien una tecnología. A pesar de que Steve Jobs no inventó el reproductor de mp3, lo que cambió la cara de la música fue Apple cuando se lanzó en octubre de 2001 el "iPod". Si usted fuera de otro planeta y viniera de visita a la tierra, usted podría pensar que los adolescentes en Estados Unidos nacieron con unos tapones en los oídos conectados a un iPod.

Si hablamos de tecnología, hay una palabra viene a la mente: FACEBOOK. Este fue creado por un joven estudiante de Harvard como la intención de ser una red social para estudiantes universitarios; la cual, h
oy en día, ha cambiado la imagen de la comunicación. Por ejemplo, la radio tardó 38 años para llegar a 50 millones de oyentes. En nueve meses, Facebook alcanzó los 100 millones de usuarios y hoy conecta a mas de 500 millones de usuarios en todo el mundo!

Viendo en el lado desagradable, ¿cuántos de nosotros podríamos olvidar la madrugada del 11 de septiembre de 2001? El ataque a las Torres Gemelas de Nueva York y a el Pentágono en Washington, ha sido el momento decisivo para esta generación en USA, al igual que el ataque a Pearl Harbor, lo fue para la generación anterior.
Aquellos de nosotros que lo hayamos vivido podemos decir con gran detalle donde estábamos y lo que estábamos pensando en ese día. Desde entonces nuestro mundo nunca ha sido el mismo. Incluso hoy en día, hay hombres y mujeres jóvenes están en Afganistán luchando la guerra contra el terrorismo.
¿Qué hay de nuestra vida personal?, ¿cuáles han sido los momentos mas decisivos? Para algunos de nosotros, los momentos decisivos comenzaron con nuestro primer día en la primaria, secundaria, preparatoria o la universidad. Tal vez el momento decisivo fue al recibir el diploma en la graduación.

Para algunos de nosotros los momentos decisivos son ocasiones felices, como el momento en que dijimos "Si, acepto" en la presencia de Dios y nuestros amigos, o el momento en que se recibe el primer hijo en los brazos.

Para otros de nosotros, el momento decisivo puede estar relacionado con tristeza. Tal vez el día que el padre se fue de casa y nunca regresó. El día que la esposa murió en nuestros brazos. Fue el día en que fuimos llamados a la oficina del supervisor y fuimos despedidos. Fue en la oficina de un doctor cuando con rostro sombrío, dijo, "tienes cáncer." O tal vez el día en que en un parpadear estábamos en medio de un accidente que cambió nuestra vida para siempre.

Cuando reflexionaba en mi vida recordé algunos momentos importantes. Recuerdo el miedo que llenó mi corazón cuando me paré sobre la tumba de uno de mis mejores amigos, el cual murió de cáncer.
Su muerte me llevó justo a los pies de Jesús.

Puedo recordar la primera vez que toque la mano de mi esposa, Robyn, en la clase de psicología en Baylor. Puedo recordar cuando era un ministro de jóvenes en la Gateway Baptist Church en Waco, Texas, cuando llegue a la Escuela Dominical y ni un solo joven se presentó. Yo era un ministro de jóvenes sin jóvenes. Al día siguiente fui con mi pastor E.J. Culp a renunciar por haber fracasado, y él sonrió y me dijo que no aceptaría mi renuncia porque creía en mí.

He encontrado a menudo que en los momentos mas difíciles de la vida puedo experimentar el poder y la presencia de Dios en las formas más poderosas y personales. Con esto en mente, t
omemos un paseo en barca con Jesús y sus discípulos. En Marcos 4, encontramos a Jesús al final un largo día de enseñanza. Mientras la noche llega, El invita a sus discípulos al barco, y a cruzar al otro lado. Ellos ni se imaginaban que este corto viaje en la barca cambiaría sus vidas y que experimentarían a Jesús de una manera literalmente extrema.
Fijemonos bien en esta historia, creo al terminar de estudiarla, usted se verá ahi, en la barca con Jesús.

35 Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado.
36 Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas.
37 Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba.
38 Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?
39 Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza.
40 Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?
41 Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?
Como lo hemos señalado anteriormente, el evangelio de Marcos fue escrito probablemente a través de los ojos de Pedro. Pedro era un pescador. Era un hombre de mar. Él era un marinero retirado, pero en este día, él y sus amigos pensaron que había llegado su fin. Ellos pensaban que iban a ser tragados por el mar y que nunca mas iban a saber de ellos.
Marcos señala que era de noche. El sol se ponía, y Jesús llamó a sus discípulos a unirse a él en un viaje a través del mar de Galilea. Él dijo: "Pasemos al otro lado." Una orden sencilla, pero no mal interpretemos el significado de la misma. Los discípulos navegaron directo a la tormenta siguiendo la orden de Jesús. Esta tormenta no fue creada por su desobediencia. Fue un acto de obediencia, fe y confianza lo que los llevo a esta situación.

Si pensamos que seguir a Jesús significa que todo es color de rosa, entonces no conocemos muy bien a Jesús. Marcos está tratando de decirnos en términos prácticos que
Jesús no nos protege de las tormentas sino a través de las tormentas.

Hace un año, cuando Dios nos llamó a servir en la ciudad de El Paso, TX, no sabíamos en lo que nos estábamos metiendo, pero desde los primeros momentos en nuestro llamado sabíamos que iba a haber días difíciles.
Hicimos memoria, y recordamos que fueron las palabras de Moisés hacia Josué las que Dios usó en nuestra vida para llamarnos a El Paso. Moisés dijo a Josué: "Esfuérzate y se valiente." Más adelante agregó, "no temas ni desmalles." Uno no necesita fuerza y coraje para las vacaciones, pero si lo necesitamos para las líneas en frente de batalla. Las ordenes de “no tener miedo” no son para las playas de Hawai, sino para los que estan en la batalla. El seguir a Jesús no es para los débiles de corazón: es para los hombres y mujeres con coraje y valor.

Sin embargo, en esta tarde, los discípulos no sabían lo que les esperaba. El Mar de Galilea, era famoso por sus tormentas sorpresa. Debido a que esta asentado en un valle, los vientos pueden venir de repente y cambiar el mar calmado en una tormenta. Al parecer, eso fue lo que pasó aquella noche en la oscuridad.

Marcos señala que un vendaval furioso o tormenta de viento azotó el mar. Los vientos y las olas comenzaron a golpear el barco llevándolo de un lado a otro. A medida que la tormenta arreciaba, los discípulos comenzaron a entrar en pánico. Mientras trataban desesperadamente de salvar sus vidas, Marcos señala que Jesús está dormido en un colchón en la popa de la embarcación. Su colchón era probablemente un saco de arena de los que se utilizaban como lastre. Este lugar, en la parte trasera de la embarcación, estaba reservado para los invitados de honor. Es evidente que Jesús estaba agotado después un largo día de enseñanza y predicación. Se había quedado tan profundamente dormido, que dormía durante la tormenta. La predicación es muy demandante. De hecho, se han hecho estudios de los predicadores y estos estudios han revelado que la mayoría de los predicadores agotan su adrenalina mientras estan hablando. Este aumento en nuestra adrenalina inspira nuestro hablar, pero también tiene un efecto secundario. Al final del día, cuando la adrenalina se ha ido, el predicador esta bastante agotado y desgastado. Podríamos sugerir que esto le había sucedido a Jesús. Él estaba agotado y exhausto. Además, no tenía miedo de la tormenta porque El sabía que iban a llegar al otro lado, pero los discípulos no lo creían asi.

En medio del alboroto, los discípulos despertaron a Jesús con una pregunta sorprendente: "Maestro, ¿no te importa que nos ahoguemos?" En otras palabras, ¿cómo puedes dormir mientras estamos luchando por nuestras vidas? ¿No te preocupas por nosotros? En base a lo que esta sucediendo, esta no fue una petición de un milagro: era más bien motivo de compasión y preocupación. Observe el título que usaron cuando hablaron con El. Ellos no lo llaman "Rabino" o "Señor", sino simplemente "Maestro". En su angustia, simplemente querían que el maestro sufriera junto con ellos. En un instante se darían cuenta de que Jesús era mucho más que un poderoso maestro: se darían cuenta de que era el mismo Dios hecho hombre.

Me temo que a veces sólo queremos que Dios sufra con nosotros, en lugar de recurrir a él en fe para que responda ante las tormentas que azotan nuestras vidas. Tenemos una mentalidad de víctimas. Creemos que estamos destinados a sufrir, y no queremos sufrir solos, queremos que Jesús sufra con nosotros.
Pero recordemos que Jesús los envió a la tormenta. El Maestro no habia terminado de enseñar ese día, aun a pesar de que estaba profundamente dormido en medio de la tormenta, todavía habia mas.
Jesús se levantó y reprendió al viento. Marcos no nos dice lo que Jesús le dice al viento, pero las olas le dijo: "Calla, enmudece." Al instante, se calmó el viento y las olas se detuvieron en seco y se convirtió en un mar de cristal. En cuestión de un instante, la tormenta se convirtió en algo silencioso y quieto.
Recordemos que Marcos cuenta esta historia a través de los ojos de Pedro. Pedro era un marinero retirado. Pedro sabía que él estaba parado frente a alguien que tenía poderes más allá de lo que podía imaginar.

David Pascoe es un veterano marinero que instruye a la gente a navegar disfrutando la belleza y enfrentando los peligros del mar abierto. Hace poco leí un artículo que escribió sobre "como navegar aguas agitadas." En el artículo, el autor confesó que en algún momento tomó un riesgo innecesario durante una tormenta.
Él escribió:

“¿Por qué sucedió todo esto? Les diré: ignoramos las advertencias de clima inestable (una depresión tropical se estaba desarrollando sobre nosotros) y no estabamos prestando atención a lo que estaba pasando con el clima a nuestro alrededor. Teníamos que haberlo visto venir (o desarrollarse) y terminar nuestra pesca pronto. Sin embargo, nos quedamos 15 millas mar adentro y nos fue bastante mal, pero bueno, aprendimos una valiosa lección en el proceso: la Madre Naturaleza tiene todas las cartas.”

Sospecho que Pedro pudo haberse identificado con la observación de David. En el mar embravecido, la mayoría de los navegantes saben que "la Madre Naturaleza tiene todas las cartas." Sin embargo Pedro aprendió una lección acerca de Jesús en aquella noche. La madre naturaleza podra tener todas las cartas, pero Jesús decide cual carta se juega. Jesús está a cargo.

Jesús rompe el silencio. Marcos nos señala: "dijo Jesús a sus discípulos." Aqui vemos al gran Maestro que no había terminado con las lecciones del día. Jesús los había enviado a propósito a la tormenta para colocarlos en momento decisivo en sus vidas, iba a enseñarles una lección que jamás olvidarían. En ese momento Jesús concentró su atención en "sus discípulos", su círculo social: los que habían dejado todo para seguirlo. Si queremos estar en el círculo social, escuchemos con atención lo que dice Jesús.

Jesús se enfrenta a sus discípulos diciendo: "¿Por qué estáis así amedrentados?" Notemos que Jesús no dijo ¿Por qué estabais así amedrentados?, en pasado, sino más bien, ¿Por qué estáis así amedrentados?, en presente. Notemos también que después de que Jesús calmó a la tormenta, Marcos señala que los discípulos seguian "aterrorizados". Jesús dijo, "¿por qué estan aterrorizados o temerosos?", Pedro le dijo a Marcos la verdad: estaban aterrorizados. En medio de la tormenta ellos tenían miedo del viento y de las olas.
Tenían miedo porque que estuvieron a punto de morir.

Entonces, siendo realistas, ¿tendríamos todos que vivir en miedo?: temiendo a las circunstancias incontrolables que nos rodean, o temiendo al que nos tiene en la palma de su mano. En esencia, Jesús está preguntando, ¿por qué tienen miedo?
¿Por qué tienen miedo en la tormenta cuando saben que estoy en el barco? ¿O, por qué tienen miedo de mí?: acabo de salvar sus vidas, he venido a salvar sus vidas. Los amo.

La gente más saludable, osea las personas que están enteras, son los que no le temen al mundo que los rodea.
Ellos no temen a las circunstancias incontrolables de sus vidas. Es decir, la gente saludable teme a Jesús. Es fácil darnos cuenta de que ellos se sienten seguros en las manos del que los creó y los ama.

Después, Jesús tocó el tema de la fe diciendo: "¿Cómo no tenéis fe?" Jesús cuestionó su fe y confianza en él.
En esencia les pregunta, "¿Por qué no confían en mí?" "¿Qué tengo que hacer para que crean en mí?" En medio de la tormenta, los discípulos se olvidaron de aquel al que realmente deberían temer. Se olvidaron de que a bordo del barco venia aquel que con una sola palabra echaba fuera demonios, sanaba a los enfermos, aquel que les acababa de dar una probadita de los misterios del Reino de Dios.
Los traductores de la Biblia NVI, bien usan la palabra "aún" dentro de la pregunta. "¿Por qué aún no tienen fe?" Después de todo lo que he hecho por ustedes. Después de todo lo que les he mostrado, ¿por qué todavía no creen; por qué aún no tienen fe?

En esa noche oscura Jesús desafiaba a sus discípulos a que confiaran en él, creyeran en él, pusieran su fe en él, pero lamentablemente entraron en pánico.
La mayoría de nosotros también tendemos a entrar en pánico en vez de tener confianza.

En 1940, CS Lewis escribió el libro "The Problem with Pain" en el tiempo de la Segunda Guerra Mundial. Durante su peregrinación espiritual, Lewis paso de ser un ateo a un creyente en el Señor Jesús. En su libro "The Problem with Pain" el aborda el viejo tema del sufrimiento en el mundo. Si Dios es amoroso y tan bueno, entonces ¿por qué permite que sigamos sufriendo? Al leer las páginas de este libro, veremos los argumentos de un creyente firme: un hombre de valor y de fe.

Ahora, adelantemonos hasta 1960, después de la muerte de su amada esposa Helen Joy, Lewis escribió un libro titulado, "
A Grief Observed." Este libro, en contraste con su trabajo anterior, no estaba escrito por un erudito intelectual tratando los grandes problemas del mundo. No, en "A Grief Observed" uno encuentra a un ser humano, luchando, con un corazón roto y lleno de dudas. Una cosa es escribir sobre los sufrimientos de los demás, y otra muy diferente es tener que abrir tu propia alma y escribir caminando por el valle de sombra de muerte.
En este libro, uno puede sentir su dolor. Lewis se sentía como si Dios no sólo le hubiera cerrado la puerta en las narices, sino que también le cerro con candado. Lewis se sentía excluido: como si a Dios no le importara. Era exactamente como cuando los discípulos trataban de despertar a Jesús diciendo: "¿No te importa que nos estemos ahogando?"

En medio de su tristeza y su dolor, Lewis hace una observación, escribiendo casi
como Job:

Cuando le hago estas preguntas a Dios, no obtengo respuesta. Sin embargo, no es como que "No responde". Osea, no se siente como una puerta cerrada. Es más como una mirada en silencio, pero compasiva. Como si Él moviera la cabeza, no en la forma negativa, pero asi como que evitando la pregunta. Como diciendo: "Tranquilo hijo, tú no entiendes."

Al final, Lewis se dio cuenta de que la puerta no estaba cerrada con candado, ni siquiera estaba cerrada.
Dios no se esconde ni esta distante. Él estaba allí en el barco. Su "no responde" no era en realidad "no" después de todo. Más bien, el Padre Celestial estaba simplemente diciendo: "Tranquilo hijo, tú no entiendes."

En esa noche oscura en el mar, los discípulos no entendían.
No entendían quien compartia el bote con ellos. No entendían que mientras Jesús estuviera a bordo no se iban a ahogar, no se iban a hundir. Estaban mas seguros que nunca porque Jesús estaba con ellos, porque esos vientos y olas que parecían tan amenazantes obedecían al sonido de su voz.
¿Estamos frente a un momento decisivo en la vida? ¿Estamos tratando de navegar en la tormenta? ¿Parece que nuestra vida está en las manos crueles del destino? Demonos cuenta que nuestra vida está en las manos de Jesús.
Marcos concluye su descripción de un destello de poder y majestad de Jesús con estas palabras: "Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?"

Seria inteligente de nuestra parte el analizarnos haciéndonos las siguientes preguntas.
¿Quién es éste? ¿Quién es Jesús? ¿Es tan sólo un gran maestro y filósofo? ¿O Él es verdaderamente el hijo del Dios viviente? Mira las evidencias: “hasta el viento y el mar le obedecen!"

¿Que es lo que nos produjo miedo el dia de hoy? ¿Que es lo que nos mantuvo despiertos durante la noche esta semana? ¿Qué estabamos tratando de olvidar el fin de semana cuando bebimos esa cerveza extra o cuando nos tomamos esa pastilla? ¿Esta Jesús a bordo? Si es así, no tengamos miedo: Jesús va a cuidar bien de nosotros, El te llevó a la tormenta y El te va a sacar de ella. No se nos olviden las palabras de David: "Aunque ande en valle de sombra de muerte". Quiere decir que vamos a caminar por el valle y no vamos a tener miedo porque "tu estarás conmigo. Tu vara y tu cayado me infundirán aliento."

Permítanos concluir con las palabras del Salmo 107:

28 Pero en su angustia clamaron al Señor, y él los sacó de la aflicción;
29 convirtió en brisa la tempestad, y las olas se calmaron.
30 Al ver tranquilas las olas, se alegraron, y Dios los llevó hasta el puerto deseado.
31 Den gracias al Señor por su amor, ¡por lo que hace en favor de los hombres!

¿Nos suena como a alguien conocido? Parece que es Jesús! Entonces ¿por qué tenemos tanto miedo? ¿Todavía no tenemos fe? Entonces, pongamos nuestra fe en Jesús!